Cada punto valdrá oro. El Lobo tiene menos equipo que antes. Es decir, es inferior a su versión del primer semestre, donde terminó casi último. Y por eso perdió 1-0 en el Bosque con Instituto en su primera presentación en el Torneo Clausura.
Errores gravísimos en todas las líneas. Orfila deberá trabajar un montón para sacar esto a flote. Solamente se salvaron Insfrán (tapó varias clarísimas de manera espectacular) y Di Biasi, muy completo en la mitad de la cancha. Todos los demás, a marzo.
Los cordobeses, con un planteo ordenado, sin ser gran cosa, lo ganaron con un tremendo zapatazo de Luna cuando se moría el primer tiempo. Y Gimnasia nunca estuvo ni cerca del empate.
En la segunda mitad Instituto manejó la pelota como quiso. Orfila probó todas las variantes, pero ninguna surtió efecto. No hay más que esto: el desguace del plantel está a la vista. No hay jerarquía.
Es así que el panorama asoma muy preocupante. Gimnasia es desidia. Gimnasia va a pelear por no descender. Hay un par de semanas más de mercado de pases: no buscar, de mínima, dos jugadores de valía para reforzar a este pobre equipo y dejar todo librado al azar, será una irresponsabilidad absoluta de la Comisión Directiva que encabeza Mariano Cowen.
Agustín Colianni
