Gimnasia igualó el clásico 0 a 0 en el Bosque. El Lobo fue bastante superior a su rival y mereció quedarse con los tres puntos, pero careció de efectividad en ofensiva y debió conformarse con el empate. El conjunto de Alfaro fue ordenado e impuso el ritmo del partido ante un rival pasivo. Si bien queda el sabor amargo de no haberlo ganado, lo bueno fue que el equipo respondió.
Sensaciones encontradas en la noche del Bosque cuando el tímido Diego Abal alzó las manos por última vez. Por un lado, la picardía de haber empatado un clásico que se estuvo muy cerca de ganar (hubiese sido lo más justo); por otro, la certeza de que Gimnasia estuvo a la altura y los jugadores demostraron ganas y ambición.
De movida se vio mucha lucha en la mitad del terreno. Por allí pasó la clave del encuentro y por allí Gimnasia sacó ventaja: la figura del gladiador Fabián Rinaudo fue de menor a mayo para terminar en el mejor del partido a la par de Mariano Andújar. Y que el arquero del rival sea figura, habla a las claras de lo bueno realizado por el Lobo.
El partido se jugó bajo el ritmo que impuso el equipo de Alfaro desde el minuto inicial, siempre ejerciendo presión en la zona media, apostando a la segunda pelota y al ataque directo, desde Bologna hacia Bou.
Con Meza tirado casi de enganche, el Lobo generó mucho más que si rival. Avisó temprano con sendos centros desde las bandas que el goleador tripero no llegó a conectar, y tuvo la más clara promediando la mitad del primer tiempo, cuando Rinaudo capturo como venía una pelota salida de un rebote, ésta se devió en un rival, y Andújar voló en forma espectacular para sacarla al córner.
¿De Estudiantes? Poco y nada. Gimnasia se las ingenió para cortarle el circuito de juego. EL Lobo fue un equipo de mucho orden, dobre todo defensivo, y halló la solidez en otro gran partido de Maxi Coronel y la buena presencia de Oreja. Puede decirse que el Tripero no tuvo puntos flojos.
En el complemento la cosa no varió demasiado. A Gimnasia empezó a jugarle en contra el gran desgaste realizado en la primera etapa y eso hizo adelantar al Pincha, que encontró su situación más clara (la única, en realidad) en los pies de Viatri, que entró solo por atrás luego de un centro de Solari y no llegó a conectar con eficacia.
Después, todo fue del Lobo. Rinaudo volvió a copar la mitad del terreno y, con el ingreso de Noble por izquierda, el Albiazul ganó en frescura y contó con sendas chances netas de gol: primero, Andújar se la sacó con el pie a Niell; después, el ingresado Rasic cabeceó y la pelota se fue besando el palo izquierdo el arquero visitante.
No hubo tiempo para mucho más. Sobre el final, Rasic tardó mucho en darse vuelta dentro del área y se perdió la última chance de abrir el marcador.
Si bien no se ganó y eso deja un gusto amargo, el lado positivo es que el Lobo fue ampliamente superior a Estudiantes y que los jugadores respondieron con creces. Quizás, como dijo Alfaro en conferencia, la mejor versión de este nuevo Lobo aún está por venir.
SÍNTESIS
GIMNASIA (0) Enrique Bologna; Facundo Oreja, Maximiliano Coronel, Oliver Benítez y Kevin Ceceri; Maximiliano Meza, Fabián Rinaudo, Roberto Brum y Lucas Licht; Franco Niell y Walter Bou. DT: Gustavo Alfaro.
ESTUDIANTES (0) Mariano Andújar; Facundo Sánchez, Jonatan Schunke, Leandro González Pirez y Lucas Diarte; Israel Damonte y Santiago Ascacíbar; Augusto Solari, Gastón Fernández y Carlos Auzqui; y Lucas Viatri. DT: Nelson Vivas.
CAMBIOS ST: 8´ Desábato x González Pirez (EDLP); 19´ Cavallaro x G. Fernández (EDLP); 19´ Noble x Licht (GELP); 25´ Castillón x Meza (GELP); 33´ Rasic x Niell (GELP) y 40´ Gil x Auzqui (EDLP).
