Letra G
36.229
Fans
29k
Seguidores
Fútbol

10-04-2019

SUPERLIGA: LOS NÚMEROS DEL LOBO

A pesar de tener estilos de juego parecidos, Pedro Troglio y Darío Ortiz tuvieron diferencias en los números finales. La posesión de la pelota fue la clave que le permitió a Gimnasia encontrar la regularidad en la Superliga y respirar en el último tramo.

Con 8 victorias, 5 empates y 12 partidos perdidos, Gimnasia terminó la Superliga posicionado en el 18va ubicación, con 21 goles a favor y 32 en contra. Sin embargo, estos no fueron los únicos números que dejó el Lobo durante el torneo.

En las primeras 19 fechas, el primer equipo de Gimnasia no pudo rescatar gran cantidad de puntos. Ganó 5 partidos (Argentinos, Patronato, Godoy Cruz, Boca y Tigre), empató 3 (San Martín de Tucumán, Rosario Central y Huracán) y perdió 11. ¿El motivo? El protagonismo dentro de la cancha. Frente a Banfield, Talleres, Unión, Belgrano, Racing, San Martín de San Juan y Atlético Tucumán, el Lobo intentó hacerse dueño de la pelota con una posesión entre 47% y 60%. Eso le generó a Gimnasia una gran cantidad de pases (entre 310 y 440) y mayor dominio de la pelota, algo que le jugó en contra al equipo de Troglio, debido a que el sistema de juego no le permitía hacerse fuerte dentro de la cancha. El resultado final de su ciclo: 18 puntos de 57 en juego.

Sin embargo, la realidad del Lobo cambió con la llegada de Darío Ortiz, que rescató 11 puntos de 18 en juego. Con tan solo una derrota, el Lobo pudo encontrar la regularidad del torneo sin marcar protagonismo dentro de la cancha, algo que Pedro no consiguió luego de las victorias ante Argentinos y Boca, donde cedió la pelota a sus rivales y apostó al contraataque. Los números del Indio indican que Gimnasia tuvo la pelota tan solo un 33%. El nuevo esquema favoreció a Gimnasia, debido a que la poca posesión disminuyó notablemente la cantidad de pases (en 198 y 280) y se apostó a la explosión de los atacantes.

Con el correr de los partidos Gimnasia logró encontrar el sistema de juego que mejor le sienta y aprovechó las virtudes de sus jugadores sin recaer en la necesidad de tener la pelota gran parte del partido. En el tramo final, el Lobo consiguió aumentar los tiros al arco rival y disminuyó las llegadas al propio, algo que había preocupado durante gran parte del torneo.

Así las cosas, la realidad indica que Gimnasia halló un camino promisorio: si mantiene la efectividad lograda en el último tramo de la Superliga, estará más cerca de arribar a buen puerto y de escaparle a la zona roja de los promedios.

Julieta Blasi

Letra G
SEGUINOS @LetraG







SEGUINOS facebook.com/letra.medios


Letra G