No hubo podio en Mendoza. Esta vez, todos los jugadores del Lobo estuvieron a la altura de las circunstancias, dejaron todo adentro de la cancha y no hay nada para reprochar. La figura fueron todos. PUNTAJES
Alexis Martín Arias (5): Prácticamente el rival no le pateó al arco, solamente la del gol que nada pudo hacer. En los penales mala fortuna, llegó a tocar el último pero no impidió el gol.
Víctor Ayala (6): El paraguayo jugó una muy buena final. Aportando al equipo principalmente en el balón detenido, pero también en defensa y animándose a pasar. Todos sus corners fueron jugadas de peligro, solo falta el gol.
Manuel Guanini (7): Gran partido del 28. Anuló completamente a Ruben y Zampedri, les ganó siempre. De arriba y de abajo. Hizo una muy buena dupla con Guiffrey. Nada que reprochar en el penal, el arquero de Central lo adivinó.
Germán Guiffrey (6): Otro de gran partido, solamente tuvo una falla que derivó en la carambola del gol. Después, siempre firme no dejando jugar a los delanteros rivales y con una buena salida desde el fondo.
Matías Melluso (7): Un verdadero Lobo. Jugó la final como se tenía que jugar, dejando todo hasta lo último. Siempre seguro en los quites, impasable el sector izquierdo. Excelente partido del juvenil.
Maximiliano Comba (8): El más destacado del equipo. Un tractor de ida y vuelta, incansable. Ayudó en defensa y generó en ataque y asistió perfecto a Faravelli en el gol. Gran partido de Maxi.
Fabián Rinaudo (6): Buen partido de Fito. Se corrió y dejó todo. Siempre bien parado para los pocos avances de Central y siendo buena salida del fondo.
Lorenzo Faravelli (7): Gran partido del Lolo. El gol retrata su partido, recuperando en mitad de cancha y llegando al área para definir. Terminó acalambrado de lo que corrió.
Lucas Licht (5): El más flojito. Aunque no tuvo errores graves, no estuvo en sintonía con el equipo. Se lo notó muy cansado y a destiempo. Con su salida, el Lobo resignó un penal casi seguro.
Horacio Tijanovich (5): Jugó solo el primer tiempo y se lo notó muy nervioso. No se animó a gambetear y perdió siempre las dividas. Troglio lo sacó en el entretiempo, para buscar el empate rápidamente.
Santiago Silva (6): El tanque se aguantó todo contra los dos centrales. Presionó y corrió los 90 minutos. Tuvo la ultima de cabeza pero el arquero la encontró e impidió el festejo. En los penales, definió muy mal y fue duro golpe arrancar perdiendo.
INGRESARON
Jan Hurtado (6): Bien por el negro. Entró como delantero para intentar empatar rápido, pero también dio una mano en defensa. Para los penales decididamente es un especialista.
Matías Gómez (5): No entró mucho en contacto con la pelota. Tan solo tuvo un disparo de afuera que se fue cerca.
Kevin Gutiérrez (5): Jugó muy poco, pero mostró buenas intenciones con la pelota.
DT Y ÁRBITRO
Patricio Loustau (Mal): Rápidamente el partido se le fue de las manos. Central hizo tiempo todo el partido y no amonestó a ningún jugador. En el primer tiempo insólitamente frenó un avance clarísimo de Gimnasia injustificable.
Pedro Troglio (Muy bien): Su equipo jugó la final como se tenía que jugar y de los dos equipos fue el único que intentó ganarla. Otra vez contagió a sus dirigidos con ese chip para la Copa y el Lobo jugó un partidazo. Con bajas y lesiones, Gimnasia fue amplio merecedor de la victoria, que no llegó por detalles. Quizás se le puede reprochar la inclusión del Bochi desde el arranque, que le impidió mantenerlo en cancha para los penales. Sin embargo, Pedro entendió que el partido se podía ganar en los 90 y apostó de manera correcta a eso. Manejó como quiso a un equipo mucho mejor desde las individualidades y desde el presupuesto, un equipo que fue a ver que pasaba a Mendoza y con nada se llevó la Copa.
El equipo de Pedro fue todo lo contrario. Lo fue a buscar, lo fue a ganar, le generó y por falta de eficacia y suerte no se le dio. Con muy poco, hizo un montón. Le dio identidad al equipo y le permitió soñar a los hinchas. No fue campeón, pero fue el mejor equipo de la Copa Argentina. Eliminó a los finalistas de la Libertadores y por mínimos detalles no coronó. Nada para reprochar. Ahora a contagiar nuevamente a sus futbolistas para sacar adelante la Superliga.
