Con un hombre más, por la expulsión de Marco Ruben promediando el segundo tiempo, Gimnasia no pudo aguantar el 1 a 0 a favor y se lo dieron vuelta. Fue 2 a 1 en Rosario. El Lobo decidió no atacar tras abrir el marcador y lo pagó caro. Brahian Alemán marcó el gol tripero.
En una ráfaga Gimnasia se quedó con las manos vacías, descuidó las marcas y aunque otra vez gozó de superioridad numérica careció de oficio para sacar adelante un encuentro que lo tenía como ganador desde los 90 segundos de partido gracias a una soberbia definición de Brahian Alemán.
El planteo de Gustavo Alfaro salió a la perfección, se abroqueló sin ofrecer espacios y lastimó en la primera posibilidad. De allí en más Central tuvo pocas opciones y arremetió sin ideas.
En la segunda etapa y sin Ruben expulsado, todo parecía indicar que el Lobo daba el impacto, pero el DT Tripero falló en los cambios dándole otra oportunidad al ex jugador Botinelli y empujado por el local, finalizó la noche de la peor manera. Primero Camacho y después Herrera decretaron la primera derrota del Lobo en el año reconocida por el propio entrenador con esta frase final “Tanta bronca que iría a La Plata caminando”.
En tanto Mauricio Romero podría haber sufrido una fisura en sus costillas debido al pisotón que le propinó Marco Ruben. Tanto esfuerzo sin unidades provocó que el plantel se fuera de Rosario sin hacer declaraciones.
