Con más lucha que un despliegue extraordinario, el equipo de Fabián Renda se impuso 66-61 ante Del Progreso, volvió a ganar en el certamen y quedó con un récord de 7-5 en la Liga Argentina.
El elenco albiazul llegó a la miniserie del sur con la premisa de una alegría y pudo conseguirla a fuerza de buena defensa y potencia ganadora en el último chico. Sí, porque el Lobo corrió de atrás todo el juego y en el cuarto decisivo se lo llevó por delante a su rival (22-13) y sentenció una victoria tan trabajada como merecida.
De esta manera, Gimnasia se llevó un juego clave y quedó con un récord de 7-5 en la Liga Argentina. Este jueves el conjunto dirigido por Fabián Renda volverá a tener acción en busca de otro éxito: desde las 19 enfrentará a Atenas de Carmen de Patagones.